Hoy me han hecho una foto con Gerrit y unos amigos suyos. En la foto Gerrit está sentado sobre mi y no parece que esté muy a disgusto, al contrario, se le puede ver muy relajado, lo que demuestra que soy más cómoda de lo que parezco.
Por fin ha decidido que deje de ser una silla de madera con acabado natural, y me ha dado algo de color. No estoy del todo satisfecha con los colores que me ha puesto: negro, gris y blanco. Son unos colores bastante apagados, pero por el momento es lo que hay. Él dice que son los colores primarios según los principios del movimiento De Stijl. Seguiremos dando guerra en su cabeza para ver si algún día me los cambia.
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